viernes, 4 de enero de 2013

Vamos a lavarles la cara...

... a los bancos.
Aunque con la que está cayendo apetezca más prenderles fuego que otra cosa, hay que reconocer que el problema no son los bancos. El problema somos las personas. Las cosas se nos han ido de las manos a  nivel mundial y nadie sabe muy bien cómo (salvo los que lo saben exactamente y están ocupados tratando de hacer ver que ellos no sabían, les obligaron o que todo era "legal") pero todos parecemos estar de acuerdo con que los bancos tienen mucho que ver y no pocos piensan que deberían rendir cuentas. Pero eso es algo de  lo que no vamos a hablar ahora.

Dadas las circunstancias, parece evidente que los bancos españoles deberían esforzarse un poquito con su publicidad para tratar de recobrar aunque sea la décima parte de la confianza de la que eran depositarios antes de que el apocalipsis económico comenzara o la burbuja explotara, como prefiráis decirlo.

Para limpiar la imagen de los bancos partiría de la definición de banco hasta lo que implica ese concepto en la vida real.

banco s. m.
  Empresa u organismo que se dedica a hacer operaciones financieras con el dinero depositado por sus clientes o accionistas.
  Edificio u oficina perteneciente a esta institución y destinado a la atención al público: me abrí una libreta en el banco de mi calle.3. Establecimiento público de crédito, constituido en sociedad por acciones.


Desde esta definición se podría dar una muestra de lo que los bancos permiten: desde tener los ahorros en un lugar seguro hasta abrir negocios, pagar la educación propia o de los hijos, tener un techo bajo el que dormir... Los bancos los llevan personas que invierten en personas y, como en toda inversión, quieren sacar un beneficio de ello, ya que es su modo de ganarse la vida. Que algunas de esas personas hayan obrado mal no resta valor a todo lo bueno que se logra gracias a los bancos, ni tampoco implica que todos los banqueros compartan esa ética (o falta de ética) profesional.

miércoles, 2 de enero de 2013

Explota, explota mi corazón






"Amor con fecha de caducidad" es el texto que, originalmente, acompañaba a esta imagen. Un texto que hablaba del cambio y de los riesgos que de él derivan. La imagen, no obstante, parece no encajar del todo con ese tema.

Desde luego, cada uno sentirá y pensará cosas diferentes al mirar esta foto; incluso esas ideas pueden cambiar de una semana para otra, de un día para otro, de un minuto al siguiente. Vemos lo que vemos y sentimos lo que sentimos en función de lo que somos en cada instante. Creo que precisamente eso, el instante, es lo que más acude a mi mente al ver la fotografía de ese corazón con una cuenta atrás, así que he pensado un texto que sigue esa línea y que, en mi opinión, cuadra más con la imagen que el original.

Vive
El ayer ya no existe y el mañana puede no llegar jamás, pero aún puedes tomar el ahora entre tus manos y hacer de él lo que quieras. Siente, corre, ríe, llora, lee, enamórate. No sabes cuándo será la última vez que podrás hacerlo, así que vívelo todo con intensidad. No dejes que los miedos te impidan hacer, decir o sentir lo que desees, no sabes si habrá otra oportunidad de alcanzar tus metas y es mejor tener errores que lamentar que vivir con la constante duda de lo que hubiera pasado si... Entra en las vidas de los demás y deja que a su vez entren en la tuya para dejar huellas de amor indeleble. Los años, los días, los minutos y los segundos de tu vida están contados y ya se ha iniciado la cuenta atrás. Deja huella y vivirás siempre.